Tres disciplinas artísticas sobre el escenario y su equivalente como parte de una banda de rock

Stand up – Cantante / guitarrista

Estas personas crecieron con ansia de protagonismo, no hay ninguna duda.El ego desmesurado (o la búsqueda del mismo) les ha llevado a querer destacar, agarrar el micrófono o la púa, y ponerse al frente la mayor parte del tiempo. Una guitarrista, probablemente hija única, hará todo lo posible por rodearse de una banda que le ayude a llevar su arte a los demás, pero queriendo destacar en sus momentos solistas (al menos lo menos uno por cada tema). Lo mismo ocurre con los cantantes, agradecidos con sus compañeros, y su público, y sus buenas noches Cáceres; pero al final el que va a agarrar el micrófono y no lo va a soltar hasta que le apaguen los focos, va a ser él. Tanto cantantes como guitarristas son los que ponen caras raras a los técnicos de sonido, pidiendo que se les pase más su sonido por monitores. También son los que piden cosas raras en el camerino.Los y las humoristas de stand up comparten ese amor desmesurado por colocarse al frente y esperar a que los ojos del público apunten hacia ellos. En la empresa de los aplausos, piden llevarse al menos el 51% de las acciones. «¡Mírame! ¿Acaso no te estoy entreteniendo? Deja el de alienarte con el móvil y observa lo que te ofrezco». Entre sus búsquedas más recientes en Google suele aparecer su nombre.Un tema aparte (después de los bises) merece el monologuista que saca la guitarra, buscando fundirse con el cantante y el guitarrista, desdibujando la línea de equivalencias que se plantea en este texto; acercándose así a un cantautourras, que en realidad lo que necesita es un abrazo.

Improv – Batería

El ritmo.El pulso.Acelerar lo que está sucediendo. Frenarlo cuando toca deleitarse con los detalles.Sea como sea, la persona que toca la batería está en escena para estructurar las canciones, llevar la batuta, y dirigir a sus díscolos compañeros. En ocasiones, hay destellos de brillantez, hallazgos que se sacan para demostrar que no tendría por qué compartir escenario con el resto de megalomaníacos que están al frente bajo los focos. Porque el batería cuando quiere (o le dejan), roba la escena. Pero lo hace una o dos veces por noche. Porque su misión es apuntalar el arte, repartir juego, darle sentido a lo que está pasando. Rápido, lector, examen sorpresa: dime cinco cómicas famosas, y cinco cantantes. Ahora baterías o improvisadoras. Exacto, si los conoces, es porque estás metido en esta mierda.Un persona a las baquetas tiene como objetivo cocinar los ingredientes que aportan los que les rodean, creando platos increíbles si los compañeros proporcionan buenos ingredientes, pero también salvando platos que podrían ser una mierda, de no ser por su capacidad de ordenarlo todo como toca.Así es un improvisador, siempre al servicio de quiénes le rodean en el escenario.Los hallazgos y las ocurrencias no valen para nada si no hay una estructura y una narrativa que los soporten. Además, tanto baterías como improvisadoras comparten el hecho de que, conociendo las reglas básicas, con pocos ensayos puedes empezar a actuar con un grupo que lleve tiempo y pueda acogerte.Larga vida al las escobillas en el jazz, larga vida al sí, y además.

Mago – Bajista

Sí, ¿no? Quiero decir, está claro, ¿verdad?

Fran J. Díaz
Fran J. Díaz
Manchego en el exilio. Doctor en telecomunicaciones en lo profesional, de vocación bacín gambitero. Dedica parte de su procrastinación a la escritura, el teatro de improvisación, y bailar lindy hop. La última vez que se le vio en un escenario haciendo stand-up, nadie sabía lo que era un pangolín. A pesar de tratarse de un ser esquivo, puede ser atrapado con un plato de croquetas, o usando frases incompletas de Amanece, que no es poco.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Más cosas

Papá Noel Reanimated

Cabeza temporal