CARLOS: ¿Sabes cuál es el colmo de un astrólogo? ¡Que lo mate un cáncer! Jajajajajajajaj.
DANIEL: Eh, no tiene gracia. Mi tía murió así.
CARLOS: Mmm sabes que es un chiste, ¿no?
DANIEL: Sí. Pero tú sabes que mi tía se dedicaba al esoterismo, ¿no?
CARLOS: …
DANIEL: Te lo digo totalmente en serio.
CARLOS: …
DANIEL: No es una broma, Carlos.
CARLOS: Me estás vacilando. Y lo entendería, ¿eh? Porque mi chiste era una mierda. Pero no tienes porqué ponerte así.
DANIEL: Repito, no es una broma, mi tía Rosario era vidente y la mató un cáncer.
CARLOS: OK, OK. Lo siento mucho, Dani. Qué putada, es una enfermedad horrible.
DANIEL: ¿Qué enfermedad? Un conocido suyo le metió 15 puñaladas en su fiesta de cumpleaños después de que ella le diera su regalo. Y digo “conocido” porque creo que “amigo” es una palabra que se le queda un poco grande después de esa reacción.
CARLOS: Joder.
DANIEL: Como lo oyes. Eso no lo vio venir mi tía cuando le estaba preparando la carta astral. En mi familia nunca olvidaremos ese 25 de junio.
CARLOS: Bueno, si me permites hacer de abogado del diablo (y vaya por delante que no justifico la violencia), puede que ese conocido suyo sólo quisiera demostrarle que la astrología es una patraña.
DANIEL: ¡Nos ha jodido! Pero, ¿15 puñaladas? Se me ocurren, como mínimo, 14 formas menos lesivas de demostrar a alguien que no tiene razón.
CARLOS: Perdona, pero esta historia me ha dejado sin palabras.
DANIEL: Como ese cáncer a mi tía.
CARLOS: Jajajajajajajajajaja sabía que todo era una broma. Eres un capullo.
DANIEL: Que no, joder, pero es que me lo has puesto a huevo.
CARLOS: Ah, entonces, ¿tú sí puedes hacer chistes sobre una tragedia, pero yo no puedo hacer un chiste malo de un tema cualquiera que, casualmente, te toca de cerca?
DANIEL: No es lo mismo, Carlos, no es lo mismo.
CARLOS: Ah, ¿no? Explícame el porqué.
DANIEL: Pues porque… Porque… Porque yo uso el humor negro como mecanismo para paliar mi dolor y tú sólo para hacer un chiste malo.
CARLOS: ¿Qué?
DANIEL: Tú mismo lo has dicho, has hecho un chiste malo. Totalmente fuera de lugar y de mal gusto.
CARLOS: ¿Qué cojones…?
DANIEL: …
CARLOS: ¿Te vas a quedar así, tan ancho, después de soltarme tremenda gilipollez?
DANIEL: …
[DANIEL EMPIEZA A PONERSE AZUL]
CARLOS: Oh, vaya, el típico «Me enfado y no respiro».
DANIEL: …
[DANIEL SE DESPLOMA]
[CARLOS DA A DANIEL UNA PATADITA EN EL COSTADO, DANIEL NO REACCIONA]
CARLOS: Siempre fuiste un gilipollas, Dani.
[CARLOS DA A DANIEL OTRA PATADITA, DANIEL NO REACCIONA]
CARLOS: Un gilipollas menos.
[CARLOS ABANDONA LA ESCENA]
FIN.
TELÓN, APLAUSOS, OVACIÓN.