Bienvenidos a nuestra puta panadería de los cojones. Jódete.

Un manifiesto

Lo primero de todo: ¿qué haces aquí y quién te has creído que eres? Mira, hay que ser muy hijo de puta por venir aquí pidiendo pan.

Bien, ya que estás aquí, te presento nuestra puta panadería de mierda. ¿He dicho que esto es una panadería? Porque no lo es, es mucho más. Es una bakery.  

Somos disruptivos, hacemos pan. ¿Sabes lo que es el pan? Posiblemente nunca hayas oído hablar de ello, es una cosa algo antigua (atávica) que queremos recuperar para ti. Es como carne pero hecha con trigo y pretensión. Bien, ahora que ya sabes lo que es: olvida todo lo que sabes sobre el pan. Porque nosotros no hacemos pan, hacemos otra cosa. Pan, eso es lo que hacemos. ¿Cómo puede algo tan simple ser tan sencillo? No cualquiera puede hacer pan, es lo más difícil que hay.

De hecho, no hablemos de pan, nosotros preferimos llamarlo NFTs farináceos.

¿Quieres el pan para comértelo, cerdo? ¿Para hacerte un bocadillo? ¿Para humillarlo mojando su perfección dorada en un huevo frito? Pues olvídate, este pan no es para eso, no es un pan, digamos, para comer. Está pensado más bien para que lo pagues y pasees la barra. Este pan es un bolso. Un Prada. Es un Prada que sí te puedes permitir, al contrario que los bolsos Prada. Es un accesorio de estatus.

Ojalá pudiéramos gentrificar el puto oxígeno aquí. Oxígeno de autor. Algún día lo haremos, te lo juro. Pero no hoy, hoy pan. Pan. Pan de autor.

¿Quieres probar nuestra barra multicereales con AOVE? Es una barra de pan que está hecha de un cereal o puede que más, por eso se llama multicereales. Son once euros cada puta barra, ahí es nada. Oh, lo siento, no nos quedan. Deberías haber venido antes. Hacemos stocks limitados a una barra por cada barra de pan que hacemos, así que se agotan pronto. Tenemos todo el pan reservado en una waitlist hasta de aquí a cinco años. Si tienes 5k seguidores en Instagram a lo mejor te podemos conseguir una barra, o una rebanada. 

Sin gluten, sin azúcares refinados, hechos para construirte. Porque tú necesitas construirte, estás hecho un asco. ¿Tú te has visto? Necesitas nuestro pan. Míralo. Mira qué pan. No has visto un pan como este en tu vida. Tú no sabías lo que eras el pan antes de entrar aquí. ¡No lo mires! ¡No mires a los ojos a nuestro puto pan! ¡¿Cómo te atreves?! Mira, mejor mira al suelo, como señal de respeto y  humildad ante la puta perfección de nuestras putas barras. 

No ofendas a nuestro puto pan mirándole.

Miradita al suelo cuando pases por el umbral de este templo que es nuestra panadería. Nuestra bakery.

Venga, venga. Compra nuestro puto pan en nuestra puta panadería de mierda. ¿Te das cuenta? La hemos decorado como la fortaleza de la soledad del puto Supermán de los cojones para que te sientas pequeño

No tenemos ningún mueble funcional porque no solo queremos joderte a ti, también queremos joder a nuestros trabajadores

Mira, las barras son carísimas, pero puedes colgarlas en las paredes para decorar tu puta casa.

En realidad, no tenemos pan para ti pero hay un puto DJ poniendo la música más horrible del planeta

¿Quieres un cruasán? Pues jódete que no tenemos.

¿Quieres una hogaza? No sabemos lo que es una puta hogaza.

¿Quieres unos picos? ¿Una ensaimada? ¿Una rosca? Pues no hay tampoco. 

Tenemos tres estrellas en Google Maps.

Abrimos de 11 a 13 de la mañana. A partir de las 17 somos un local de copas, pero no servimos copas. Solo pan. La entrada cuesta 25 euros. 

Venga, lárgate. Compra el pan en alguna panadería de mierda que no sea la nuestra. ¡Fuera de aquí, fuera, fueraaaa! No mereces nuestro pan. 

Por favor, vuelve, compra nuestro pan. Te necesitamos para crear comunidad.

: )

Kike García
Kike Garcíahttp://www.elmundotoday.com
Kike García (Motilla del Palancar, 1957) és un dels creadors de El Mundo Today, on escriu articles, publica llibres i col·labora en mitjans com El País i Cadena Ser. És soci de la Llibreria La Llama Store, director de La Llama Fest, soci de La Llama School i actual editor de Ratachillona.

3 COMENTARIOS

  1. Qué sacrilegio. ¿Quién te crees que eres, Kike García? No mereces hacer una nota sobre un producto tan sublime que no se puede describir con palabras. ¡Arrodíllate y reza! ¡Penitenciágite!

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